Buenas noches piedra

blog       Todos los conflictos nacen debido al mal uso de la palabra. Desde que somos niños y comenzamos hablar, empezamos a experimentar los primeros enfrentamientos comunicativos. Pero, ésto no sólo ocurre con los más pequeños de la casa, también es frecuente en los adultos. De hecho, muchas guerras se han iniciado por un uso indebido en el acto comunicativo. Siempre he pensado, que la solución perfecta para evitar escuchar opiniones absurdas, que le ponen la piel de humano a la gallina, sería la de hacer pagar un impuesto al charlatán de turno, a los de fácil crítica destructiva, a los egos con patas y a las lenguas que faltan a la verdad y tergiversan todo. ¡No sé que piensan ustedes sobre ésto! pero creo que esta medida ayudaría, y mucho, a bajar los indices de conflictos en las familias, en la sociedad, e incluso a nivel mundial. Mi propuesta no tiene como objetivo cerrarle la boca a nadie, sino más bien busca el propósito de reeducarnos no sólo en el acto comunicativo, sino también en el uso del lenguaje para conseguir conversaciones llenas de mensajes constructivos, positivos… Sé que está idea de pagar por hablar con mala leche es algo platónica y que además, puede dar una sensación negativa o quizás parezca castigadora. Pero, la historia no para de repetirnos que el humano no sabe aprender de otra forma. Me explico mejor, en el siglo XVII a.c se estableció una ley que fue bautizada como la ley del Talión, ésta establecía el principio de proporcionalidad de venganza, en otras palabras, que el agresor o ladrón recibiera un castigo equivalente a su acción -ojo por ojo, diente por diente- Afortunadamente, esta ley ya no existe en nuestros tiempos, pero hay que admitir que fue una medida eficaz en aquella época, que logró contener venganzas sin límites. No cabe duda de que las leyes, definen a la perfección como es una sociedad. Así pues, criticarlas sería un absurdo pues, ellas nacen por el comportamiento de nuestros actos. Estoy plenamente convencida que en unos siglos, las futuras generaciones se llevaran las manos a la cabeza, al descubrir nuestras leyes, unas leyes que para nosotros hoy son válidas y necesarias. Unas leyes que al igual que la del Talión, sólo pretenden humanizar a un hombre que  se perdió en el sendero, un hombre que vivió en un pasado que no puede medirse ni en años, ni en siglos, ni en ningún concepto que conozcamos. Un hombre que vivió en un tiempo que no puede medirse con palabras, y que no cabe en nuestro entendimiento. Un hombre que en vez de corazón tenía una llama de luz. Hablar es un acto espiritual, porque todo lo que de la boca sale, proviene directamente del corazón, y ésto no lo digo yo, lo dicen los grandes sabios y maestros de la vida. El hombre de hoy sabe poco del hombre del pasado, y lo poco que sabe proviene de unos libros escrito por manos manchadas de vileza. Antes de que el hombre perdiera su libertad, mal vendiera su sabiduría y aceptara la oscuridad como la luz para sus días, éste era un hombre sin ataduras de ningún tipo que comprendía a la perfección el mundo en el que vivía. Éste era un hombre que no se creía dueño de nada, sino que sabía que era parte del todo. En aquella época, donde todo estaba en armonía, la comunicación era distinta a la de ahora, el lenguaje que se usaba no era gráfico sino que eran fonemas, es decir sonidos que provenían de nuestro interior. Intentaré ser más clara… Los mantras como por ejemplo, el tan conocido OM, es un concepto-sonido que emite nuestro cuerpo, no te extrañes sino nunca lo has escuchado , pues para lograr captarlo debes de estar en silencio. Cuando digo en silencio, no me refiero a estar con la boca cerrada, sino con la mente aquietada. De nada nos vale estar en posición de loto, meditando en silencio y escuchando una música elevada, cuando tus pensamientos están en la cocina, comiéndose un bocadillo de chorizo de Teror (Teror es un bello pueblo de la isla de Gran Canaria) El lenguaje de nuestros ancestros era tan sutil, que éstos incluso desarrollaron el poder de comunicarse a través de la telepatía. Muchos caerán en el error de asociar telepatía con magia y ésto no es así. Pongamos otro ejemplo, imaginen el pensamiento de un niño que no sabe caminar y que ve a un adulto desplazándose, corriendo, saltando… para ellos, estas acciones son mágicas y de superhéroes. Sin embargo, todos sabemos que son cosas que se logran con el tiempo, la evolución del cuerpo y la práctica. Pues lo mismo ocurre con la telepatía. Es más, les diré que muchos de nosotros sin darnos cuenta, ya practicamos a niveles de principiantes la telepatía, les pongo en situación. Imaginen un niño, que le dice a su madre que quiere ver la tv, un lunes y a las doce de la noche. La mirada de esa madre informaría de inmediato a su hijo, y sin necesidad de emitir palabra alguna un claro, sencillo y directo NO. ¡Se dan cuenta! Éste sería el nivel más bajo dentro de la telepatía. jajajajajaja (ya me conocen, el humor siempre me acompaña) En fin, el lenguaje tiene una parte consciente y otra subconsciente que van dándose empujones cada vez que decidimos algo en voz alta, y ésto es lo que provoca los conflictos dentro del acto de la comunicación. Lo interesante sería que cada vez que lanzamos un mensaje, el consciente y el subconsciente fueran uno, así nos evitaríamos más de un enfado. Lo bonito de este asunto, es que se puede lograr porque este lenguaje ancestral está dentro de nuestro ADN, y con práctica todo se puede lograr. ¿Cómo se pone en práctica ésto? se preguntaran. Pues es muy sencillo…de la misma manera que se hacen todas las cosas, construyendo la casa por los cimientos. Lo primero que debes hacer es cambiar tu forma de expresarte, y aunque parezca fácil, no lo es, pues requiere de mucho trabajo de atención. Una actividad que puedes realizar es prestar atención en todo lo que dices durante una hora, y cada vez que digas  o pienses algo negativo, prohibitivo… deberás comenzar la actividad desde cero. ¡Créeme te sorprendas con tu forma de pensar y hablar! La primera vez que lo hice, fallé tantas veces que se pasaron las 24 horas del día, y no logré estar ni siquiera quince minutos seguidos sin que me atacará un pensamiento negativo. Ahí fue cuando descubrí, lo fácil que nos resulta ser negativos y lo difícil que es ser lo contrario. Aquello me dejó tan impactada que desde ese día, practico a diario este ejercicio, eso sí cuando me sale un pensamiento de tonalidades oscura no me castigo, ni me culpo, tan sólo cojo aire y continuo como si nada hubiese pasado, como cuando te caes en la calle y te levantas con la cabeza bien alta, como si no hubiese ocurrido nada. Otra de las actividades que yo práctico es la cuidar el lenguaje cuando hablo con mi hijo… ufff ….ésto es todo un reto porque cuando llega la noche y tienes un cansancio físico que no sabes donde meterlo, cuando las expresiones creativas y positivas a esa hora del día les cuesta ponerse en pie…ahí es cuando más tienes que poner de tu parte. Recuerdo como si fuera ayer, uno de mis primeros retos como madre…¡Bueno, es que se podría decir que fue ayer!…. Esos retos que debes superar por el bien de la educación de tu hijo. La prueba de la que les quiero hablar, es la de acostarlo temprano en la cama de manera armoniosa y sin conflictos. ¿Les suena? Todos sabemos que los principios son difíciles y todos los que hemos pasado por esta prueba, luchamos contra ello sin darnos cuenta que no hace falta sufrir tanto, para lograrlo, puesto que educar a los hijos es más sencillo de lo que parece. Un día, ya harta de pelearme con la dichosa hora de irse a dormir y tirada en el suelo, al lado de la cama de mi hijo, como si me hubiesen dado una paliza, una idea brillo dentro de mí….y comencé a cambiar mi forma de educar, tras aquella gran idea, todo cambio para mejor. Todo aquello me hizo pensar, que el cerebro no entiende la palabra NO. Para que veas que es cierto lo que te digo, te propongo un juego. Cierra los ojos, y piensa en una piedra de color verde. ¿Ya? ¡Qué bonita piedra! vale, pues ahora, cierra los ojos de nuevo, y NO piensen en la piedra verde. ¡Imposible! ¿Verdad? pues ahí está la respuesta a nuestros problemas y conflictos. Nuestro cerebro no comprende nuestro lenguaje, no entiende la palabra NO y por eso siempre estamos mal interpretando lo que se nos dice. Decirle a un niño, “No toques eso” es decirle “toca eso” Por tanto, la solución está, en cambiar tu forma de expresar las cosas. La técnica que usé con Paulo fue la de ponerle una piedra en su mesa de noche y decirle que aquella era la piedra de las buenas noches, y que cuando el reloj marcaba las ocho sucedía algo mágico (no puedo contarles mucho más , porque ésta es otra de mis historia para publicar) Les diré, que aquello captó tanto la atención de Paulo, que a partir de ese día, irse a la cama es como ir al parque a jugar. En cuanto a la piedra en la mesa de noche, no vayan a creer que ésto es algo inventado por mí, porque no es así. La historia que le conté a Paulo, y lograr que éste se fuera a la cama temprano a dormir, sí que es creación mía pero, poner una piedra cerca de la cama es una técnica milenaria. Desde los días de la antigua China, un pueblo que creía en el poder de la piedra jade, también conocida como la piedra sueño, colocaban junto a su cama ésta piedra, para promover que los sueños fueran más claros y reveladores. Así que si tienes problemas de insomnio, quizás encuentres una solución en esta creencia de dormir cerca de la piedra Jade.

Estamos muy cerca de despertar cuando soñamos que soñamos. (Novalis)

Las piedras de la locura

      elboscoEspaña siempre ha sido un país de gran extremosidad, un clan que para poder pertenecer a él, se debe cumplir con su norma básica, ¡Hay que exagerarlo todo! El lema con el que la mayoría de los españoles se identifican es, “Más vale que sobre que no que falte”. Y quizás por ello, la categoría de palabra preferida del español sería la de los adjetivos superlativos, un término que le viene de anillo al dedo al ibérico, a la hora de comunicarse con otros. Los españoles, para poner más énfasis en sus conversaciones, intercalan dichos o frases. Los dichos son un recurso fácil para ilustrar algo de manera impactante, aforismos que tienen diversos orígenes pues, algunos proceden de una historia, otros de una anécdota, un cuento, un personaje real o ficticio,…Hoy, les hablaré de uno de los dichos más usados por los españoles, “Tener una pedrada en la cabeza” usada para referirse aquellas personas que no suelen comportarse o pensar igual al resto. Estoy segura que muchos de los que estarán leyendo este blog, no sólo conocen esta expresión sino que además, la habrán usado en alguna ocasión para referirse a alguien quien, según nuestra opinión, ha hecho o dicho algo fuera de lo común. Pero, ¿Por qué relacionamos las piedras con la locura? Esta relación entre la chifladura y el mineral fue algo que nunca logré entender en mi época de adolescente, hasta que por fin un día, encontré un obra artística, que despertó nuevamente mi interés por esta expresión, un lienzo que tenía como tema principal la locura y en donde, se reflejaba claramente, el modo en como se llevaba a cabo su sanación. El Bosco, un erudito y artesano de las emociones y pecados de la humanidad, creó un cuadro titulado “La extracción de la piedra de la locura”, donde se muestra uno de los temas más curiosos e interesantes del mundo del arte, la locura. En el dibujo se enseña, la alegoría de una práctica común, que se realizaba en la Edad Media para resolver la locura. En dicha obra, se aprecia como un señor era anestesiado por plantas con propiedades que tenían este poder, después de ésto se le hacía una pequeña apertura en el cráneo, en aquella zona donde el responsable de aquella intervención quirúrgica creía que se hallaba dicha enfermedad, posteriormente le sacaba una piedra de la cabeza al susodicho loco, con el fin de arrancarle la locura, y de este modo devolverle la cordura a su paciente. Según el pintor, en la Edad Media se tenía el convencimiento de que la locura tenía su origen en una piedra que toda persona desequilibrada tenía en su cabeza y de ahí, la tan popular expresión, tener una pedrada en la cabeza. En cuanto a este tema sobre la piedra de la locura, en ningún momento se tiene conocimiento de que se realizaran operaciones en la Edad Media para extirpar dichas “piedras”. Todas estas ilustraciones de la época que reflejaban esta práctica, un tema bastante habitual dentro de la pintura de época, denunciaba una costumbre clásica de la Edad Media, que llegó incluso hasta el Renacimiento. El tema de los cálculos craneales es una metáfora que les sirvió a muchos artistas como el Bosco, para plasmar la estupidez humana en su máximo esplendor, a la vez que, para criticar una práctica que sí se venía haciendo desde la antigüedad, la trepanación. La trepanación, de la que se tienen indicios desde la era neolítica, pues se han descubierto cráneos trepanados, fue una intervención médica que consistía en agujerear el cráneo, a fin de eliminar enfermedades consideradas de origen cerebral. No hay ningún dato en el que se recogiera el éxito de dicha práctica, así que como dice mi marido, el que calla otorga y por ello, sospecho por no decir, que pongo las manos en el fuego, que suena un poco exagerado… ahhh, espera que soy española, y por tanto puedo decirlo. Pues, enciendan esos fogones que ahí van mis manos, estoy convencida de que todo aquel pobre individuo etiquetado en aquella época como loco, y por tanto operado, no contó con más de un día de vida, tras aquella curiosa operación. La verdad es que me pasaría horas hablando sobre el asunto de la locura, pero me he prometido a mi misma no extenderme mucho en el blog de hoy, y estoy segura, segurísima, requetesegurísma que muchos de ustedes sabrán por donde van los tiros sobre mi opinión en este asunto. Así pues, no voy a ser yo, las que les meta piedras en la cabeza para volverlos locos, ya tenemos suficiente locura con las nuevas tarifas de la electricidad. A éstos, que tuvieron la gran idea de aceptar esta subida de precios, sí que deberíamos extraerles las piedras de su cabeza. En fin, cada loco con su piedra y un favor les pido, intenten cada día, ser un poco más locos que ayer, porque según tengo entendido la locura en su justa medida es el antídoto para cualquier mal. Afortunadamente, cuento con personas que practican ésto que les acabo de decir, estar un poco locos. Y aunque no lo crean, me siento afortunada por todo lo que ellas me aportan, pues su locura viene aliñada con el mejor aceite y vinagre; La alegría y la creatividad.

¨Todos fuimos dotados con una chispa de locura… no la desaproveches¨ -Robin Williams –

¿Les apetece piedras como primer plato?

patatas-kaolin       Ciertos países del mundo tienen una cultura gastronómica, cuyas raíces ancestrales siguen presenten a la hora de elaborarse en los fogones de las cocinas, y como resultado no sólo tendríamos platos exquisitos, con los que chuparnos los dedos, sino que además, estaríamos llevándonos a la boca alimentos que nos mantendrían fuertes y sanos. Por otro lado, rincones del mundo como podría ser E.E.U.U no cuentan con la misma popularidad, ¡ya sé que señalar es de mala educación!, pero todos conocemos la reputación del arte culinario de América del norte, una nación donde el cine, la moda, la música… tienen el sartén agarrado por el mango, un sartén que sólo conoce de comida basura. Por esta razón, el gobierno americano ha tenido que tomar serias medidas en cuanto a concienciar y educar a sus ciudadanos, de la importancia de tener buenos hábitos alimenticios. La dieta mediterránea es quizás, la más conocida a nivel mundial. La fama de esta dieta no sólo la señalan como beneficiosa para nuestra salud sino que además es apetitosa, divertida y rica en sabor. Pero, ¿Será cierto todo lo que se dice de la dieta mediterránea? Entre Pakistán e India, existe un pueblo conocido como “el oasis de la juventud” ubicado en el valle del río Hunza. Esta gente con una taza de mortalidad baja, pues viven hasta los 110 y 120 años, no conocen ni la vejez, ni las enfermedades. Se cree que esta calidad de vida se debe a varios factores. El primero de ellos es que estos habitantes se bañan en aguas de bajas temperaturas y que practican deporte a diario. Segundo, su dieta, totalmente distinta a la nuestra y basada en proteínas, sería la causa primera que se le atribuye a la longevidad de las personas de este oasis, con el extra, tal y como señala el doctor Robert McCarrison, de que este pueblo también es vegetariano. Mi pregunta es ¿Sí nuestra dieta es tan sana como dicen, por qué nuestra salud no es igual a la de los pobladores de Hunza? Los que me conocen, saben que me encanta estar bien informada en cuanta a la alimentación y por tanto, son muchos años leyendo sobre el asunto. Así pues, me siento capacitada para al menos dar mi punto de vista. En primer lugar, no creo en ninguna dieta, más sencillo y directo no lo puedo decir. Con ésto, no estoy diciendo que no existan buenas dietas, pero por muy buena que sea ésta, si los alimentos que consumimos nacen de tierras contaminadas, no es descabellado pensar que lo que nos echamos a la boca no debe ser bueno. En otras palabras, si me dan un pescado fresco con mercurio cocinado con la mejor aceite de oliva, cuyos campos han sido rociados por aviones, no identificados, con un humo blanco que contiene químicos que producen cáncer, pues ustedes me van a perdonar, pero hace tiempo que deje de chuparme el dedo ¿Y ustedes?. ¡Más clara no puedo ser! Ese pescado que se lo coman las madres o los hijos de los responsables de que nuestras aguas contengan mercurio y de que cada día aviones que dan más miedo que un ovni, estén sobre volando nuestros campos vertiendo químicos. Como en otros muchos blogs, me voy a detener para tomar un té, respirar y en un ratito continuo, porque este tema me quita las ganas de comer, por decirlo finamente. (pasada media hora…) Tras el pequeño enojo de antes, y ahora algo más tranquila continuaré con este tema que seguro a muchos les apasiona tanto como a mí. Me da mucha tristeza ver los carros de la compra en los supermercados, esos carruajes de hierro con alocadas ruedas que saben muy bien a que estanterías llevarnos, carros llenos de productos, que para mi forma de entender la alimentación, son latas, cajas, bolsas, paquetes con veneno. (informo que en este preciso momento, estoy escuchando uno de esos aviones del que antes les mencionaba, ufff no sé si tengo suficiente rosa silvestre para hoy) *La rosa silvestre es un arbusto espinoso con pequeños frutos rojizos que se utilizan para infusiones. Ésta deliciosa infusión medicinal tiene el poder de relajar los nervios. Disculpen mis ideas y venidas, sentarme a escribir el blog de cada viernes para ustedes, es como reunirme con amigos. Lo que antes les estaba diciendo sobre los supermercados, estoy más que segura que muchos de ustedes también tendrán ese mismo sentimiento, ¡o eso espero! En ocasiones, me detengo y miro los grandes almacenes de comida y me quedo pensando como es posible que el mundo este tan mal repartido. En algunas zonas, las personas tiran toneladas de comida a diario y en otras, no tienen nada para echarse a la boca, ¿Ironía o Tiranía? La verdad es que no sé que responder a dicha pregunta. Ya casi estoy llegando al final del blog, y seguro que muchos se preguntaran ¿Hoy no habla de piedras la Johanna? Pues claro que sí, pero las sorpresas siempre se dejan para el final. En este mes de diciembre me tropecé con dos artículos muy curiosos que hablan de piedras y que tienen relación con la alimentación. El primer artículo me sorprendió, porque en él se hablaba de una adicción de la que jamás había escuchado hablar; “comer piedras” a esto se le conoce como la Alotrofagia, es decir, personas que consumen de manera incontrolable cosas de sustancias sin valor nutricional, en el caso de las personas que comen piedras se le conoce como la Litofagia. Según leí en este singular artículo, El origen del síndrome de pica ha sido motivo de controversia desde hace tiempo, tanto así que las hipótesis existentes provienen de distintos campos del saber humano, como Psicología, Nutrición y Antropología. Una de las causas de alotrofagia más aceptada es la hipótesis nutricional, la cual sostiene que es provocada por anemia, padecimiento caracterizado por dolor de cabeza leve, palidez, irritabilidad, baja concentración mental e incapacidad para hacer esfuerzo físico debido a que el organismo no cuenta con suficiente hierro, zinc y vitaminas del complejo B, necesarios para producir la proteína que ayuda a que el oxígeno sea transportado por la sangre. Desde mediados del siglo XX se comprobó que varios pacientes con déficit de minerales ingieren tierra, yeso o piedras, tal vez porque de manera inconsciente buscan obtener de ellos los nutrientes que les hacen falta.Obviamente, hacer ésto, supone un peligro para la salud. En uno de los párrafos de este escrito, se afirmaba que los médicos administraban multivitamínicos y suplementos alimenticios en los pacientes con este problema para erradicar la pica. ¡Tranquilos! no pienso terminar el blog de hoy dejándoles con este mal sabor de boca. Como les decía antes, tengo otro artículo que también aborda el tema de comer piedras, pero en este caso piedras con mas glamour que se presentan en platos de restaurantes galardonados con diferentes premios y reconocimientos ¿Quieren saber más sobre estas piedras? Pues nos vamos para el norte de España, a la costa del golfo de Vizcaya y en la proximidad de la frontera con Francia, ¿Saben de que lugar les hablo? San Sebastian. En esta ciudad española, un importante chef, Andoni Luis Aduriz y del que creo, que ha aparecido en el programa televisivo master chef ha creado una comida muy atrevida donde las piedras son las protagonista de un plato bautizado como las patatas Kaolin. El propio chef ha declarado que este plato ha provocado en el comensal cierto temor a la hora de morder, pero estoy segura que nadie se negaría a comerlas en dos bocados ,pues Andoni es un cocinero que sabe muy bien del arte del buen comer.